BOGOTÁ TIENE RESERVAS DE AGUA PARA ENFRENTAR EL FENÓMENO DEL NIÑO

EMBALSE DE CHUZA

EMBALSE DEL SISGA

Los embalses que surten de agua a la capital y 11 municipios de Cundinamarca están con volúmenes normales; esta situación permite al Acueducto de Bogotá garantizar el servicio de agua potable sin complicaciones ante otro eventual Fenómeno del Niño.

Con los actuales volúmenes en los embalses, que hoy suman más de 700 millones de metros cúbicos, y la interconexión de los sistemas de distribución, la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá podrá hacer uso de las reservas para suministrar agua durante más de 7 meses continuos, incluso si no se presentaran lluvias.

Los siguientes son los niveles de los embalses, a la fecha, en cada uno de los tres sistemas de distribución de agua de la ciudad:

• Chingaza: Embalse de Chuza: 214 millones de metros cúbicos, 95 por ciento de su capacidad de almacenamiento.

• Embalse de San Rafael: 15 millones, 10 por ciento de su capacidad. Este embalse se encuentra en nivel bajo porque ha estado abasteciendo a la ciudad durante los dos últimos meses, mientras se hace el mantenimiento a túneles de Chingaza. La próxima semana se iniciará su llenado con agua de Chuza, una vez concluyan los trabajos en Chingaza.

• Sistema Sur: Embalse La Regadera: 2 millones 500 mil metros cúbicos de agua, 62 por ciento de su capacidad de almacenamiento. Embalse de Chisacá: 5 millones 500 mil metros cúbicos, 78 por ciento de su capacidad.

• Sistema Río Bogotá: Embalse de Tominé: 350 millones de metros cúbicos, 63 por ciento de su capacidad. Embalse de Sisga: 60 millones de metros cúbicos, 60 por ciento de su capacidad. Embalse de Neusa: 70 millones de metros cúbicos, 70 por ciento de su capacidad.

Cabe recordar que este es un periodo de lluvias que se extiende hasta diciembre en el sistema Chingaza, lo que favorece el almacenamiento de agua en Chuza y San Rafael.